Historia San Rafael
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Historia San Rafael

La gran devoción

de la ciudad de Córdoba

La gran devoción que la ciudad de Córdoba siente por San Rafael tiene su origen en las apariciones del arcángel al sacerdote Andrés de las Roelas. Para comprender la importancia de este episodio, tenemos que situarnos en el contexto histórico de la Contrarreforma, con un marcado ambiente religioso, donde el culto a las reliquias y a los santos alcanzaría un momento de gran esplendor.

De ahí, que dos hechos surgidos en esta época producirán una gran agitación espiritual y devoción popular, que marcará la espiritualidad cordobesa. Todo se inicia en 1575 cuando se descubrieron en la iglesia de San Pedro unas reliquias que se creyeron de los Santos Mártires de Córdoba, pero al no existir pruebas fehacientes de su veracidad, no se dispusieron al culto.

Tres años después, según las revelaciones del padre Roelas, en varias ocasiones se le apareció el arcángel San Rafael para verificarle la autenticidad de estos restos. Dudoso el sacerdote de la identidad del ángel, este se la confirmó a través del celebre juramento:

“Yo te juro por Jesucristo Crucificado que soy Rafael, Arcángel a quien Dios tiene encomendada la Custodia de esta Ciudad”.

Este juramento configuraría la principal distinción del San Rafael cordobés: la cartela con las palabras con las que juró el arcángel su identidad y custodia de la ciudad.

Juramento que también dará nombre al templo donde hoy se le rinde culto, construido sobre el solar de la casa de Roelas, lugar de las apariciones.

Será a mediados del siglo XVII cuando la figura de San Rafael arraigue plenamente como Custodio de Córdoba. Tras una epidemia de peste, que dejó numerosas víctimas en la ciudad, se incrementará el culto al arcángel a través de diversas acciones en búsqueda de su protección. Será el caballero veinticuatro, José de Valdecañas, con el apoyo de los cabildos civil y eclesiástico, quien fomentará la devoción de la ciudad hacia su Custodio a través de varias acciones.

Por un lado, gestionará la adquisición de las casas del padre Roelas que conforman hoy el templo del Juramento de San Rafael; encargará también al pintor Antonio del Castillo la imagen que fijará el modelo de representación del arcángel cordobés; al mismo tiempo promoverá el rezo del 7 de mayo, germen de las festividades religiosas y cultos a San Rafael y; finalmente, encomendará la colocación en el puente romano de la imagen protectora del Custodio, precedente de numerosos triunfos que se erigirán en Córdoba durante los siguientes siglos. Con el tiempo, estás líneas de actuación de Valdecañas marcarán las pautas de lo que hoy configura la riqueza patrimonial en torno a la figura de San Rafael.

PATRIMONIOS INICIALES

La figura de San Rafael en Córdoba, desde el punto de vista patrimonial, supone una enorme riqueza. Riqueza por la gran cantidad de elementos patrimoniales que existen en la ciudad relacionados con el arcángel, pero sobre por la diversidad de manifestaciones en las que se ha desarrollado. De la misma manera que el concepto de patrimonio ha ido modificándose y ampliándose en los últimos tiempos, los elementos relacionados con la imagen del Custodio de la ciudad, han ido desarrollándose y cambiando en los distintos períodos de su historia. Una figura que en origen fue una gran devoción para los cordobeses, con el paso de los siglos, se ha convertido también en una seña de su identidad. Por este motivo, para intentar abarcar esta riqueza y así, poder conocerla y comprender mejor, consideramos conveniente establecer una clasificación desde punto de vista patrimonial, en función de su tipología.

PAISAJE CULTURAL

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PATRIMONIO INMUEBLE

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PATRIMONIO MUEBLE

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PATRIMONIO DOCUMENTAL Y BIBLIOGRÁFICO

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PATRIMONIO INMATERIAL

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